Hacer mi propia página web o contratar un diseñador web: ese es el dilema.
n los últimos años con el surgimiento de excelentes CMS (por sus siglas en inglés Sistemas de Gestión de Contenidos) y con miles de recursos disponibles en el mercado, el diseño de páginas web ha tomado un giro sorprendente, poniendo al alcance de casi cualquier persona la posibilidad de crear su propio sitio desde cero cambiando la forma tradicional de diseñar sitios web.
Con potentes sistemas en el medio, unos más amigables que otros, WordPress, Wix, Droopal y Joomla, por mencionar los más conocidos, han ganado gran popularidad, facilitándote no solo la plataforma para hacer tu página web sino también todos los recursos como plantillas y temas de diseños coloridos y atractivos para darle forma a dichos portales web de toda clase y tipo de negocios.
El diseño de sitios web y todas las herramientas que giran alrededor de éste se ha convertido en uno de los negocios más rentables y atractivos de la industria del Internet, el cual mueve millones de dólares al año.
Cuando planificamos tener nuestra propia página web tradicionalmente pensamos en 3 cosas: (1) comprar un dominio, (2) contratar un servicio de hosting y (3) diseñar mi sitio web /contratar a un diseñador web.
Comprar un dominio
Definitivamente “todo empieza con un dominio” que será tu propia marca en el universo del Internet. Procura que el dominio identifique plenamente el trabajo o actividad de tu negocio u organización, mientras más atractivo mucho mejor. Asegúrate de tener pleno control sobre tu dominio, no te conviene bajo ningún punto de vista cambiarlo por uno nuevo en el corto o mediano plazo. Cambiar tu dominio no es como cambiar de número celular. Una vez lanzada tu página web tu objetivo será ganar mayor presencia en buscadores como Google. Esa presencia se obtiene con mucho trabajo y después de cierto tiempo, y estará vinculada directamente con tu dominio toda la vida: ¡no te conviene perder esta presencia de un momento a otro!
Contratar un servicio de hosting
Basta con hacer una búsqueda en Google para darse cuenta la diversidad de opciones de hosting que existen en el mercado, todas ellas ofreciéndote las mejores características y ventajas, pero ¿cómo sé cuál es el mejor? Dependerá mucho del tamaño y necesidades de tu sitio web.
Escoger un buen hosting es fundamental para el buen rendimiento de tu página web. Una vez la hayas lanzado, si el servidor donde está alojada tu página no tiene las características adecuadas de memoria, rapidez o almacenamiento, entonces más adelante será imposible, por ejemplo, optimizarla para que sea rápida y eficiente.
Mi recomendación primordial en este sentido es que no contrates un servicio de hosting compartido (shared hosting). Después de mucho tiempo de estar experimentando con los proveedores de hosting, en Cultura Digital hemos encontrado el mejor servicio para que nuestras páginas ofrezcan una excelente experiencia de usuario UX, consiguiendo páginas web que cargan en menos de 4 segundos.
Hacer mi propia página web o contratar un diseñador web
Si estás pensando en diseñar tu propia página web, el primer dilema con el que deberás afrontarte es qué CMS utilizar, pues debes tener claro que una vez hayas optado por alguno de ellos, deberás dedicarle muchas horas al aprendizaje acerca de su funcionamiento, los mejores temas o plantillas disponibles, plugins para la integración con redes sociales, motores de búsqueda e e-commerce, y una larga lista de etcéteras.
Si decides contratar una empresa que te ayude con el diseño de tu página web deberás evaluar la calidad de los trabajos que realiza. Existen en el mercado nuevas empresas y otras no tanto que se han posicionado como proveedores tradicionales, algunos con importantes carteras de clientes y diseños sorprendentes en sus portafolios.
Evalúa el rendimiento de los sitios web creados por esos proveedores por sus características como adaptabilidad (responsiveness) a toda clase de dispositivos como Smartphones, Tabletas, Laptops y Desktops, velocidad de carga, seguridad y la experiencia de usuario (UX) que te ofrecen al interactuar con sus páginas web.
Existen varias herramientas para medir la calidad y el rendimiento de las páginas web, algunos de ellos son:
- 1Pingdom: probablemente una de las herramientas más conocidas de prueba de velocidad de sitios web. Sus informes se dividen en cuatro secciones diferentes que incluyen un desglose en cascada, grado de desempeño, análisis de página e historia.
- GTmetrix entra en gran detalle ya que comprueba las métricas de PageSpeed y YSlow, asignando a su sitio una calificación entre F y A. Sus informes se dividen en cinco secciones diferentes, incluyendo PageSpeed, YSlow, desglose en cascada, video e historial.
- 3WebPageTest es muy similar a algunas de las herramientas mencionadas anteriormente, pero tiene más de 40 ubicaciones para elegir y más de 25 tipos de navegadores (incluido el móvil). Le asigna a tu página una calificación entre F y A basada en diferentes pruebas de rendimiento, como FTTB, compresión, almacenamiento en caché, uso efectivo de CDN, etc. Su informe está dividido en seis secciones que incluyen un resumen, detalles, revisión del rendimiento, desglose de contenido, y capturas de pantalla.
No subestimes el rendimiento de tu sitio web
Se habla mucho que motores de búsqueda como Google rastrean mejor las páginas web que ofrecen una mejor experiencia de usuario UX a sus visitantes, y en ese sentido hablamos de páginas web que se distinguen por sus características de optimización para ser más adaptables a dispositivos, veloces y seguras.
La velocidad de carga de las páginas web es primordial, por ejemplo, un estudio enfocado en la UX a principios de este año encontró que:
- Tan solo un segundo que se añada a la velocidad de carga de la página puede reducir las ventas en un 27% – Soasta
- Las páginas que cargaron en 2.4 segundos experimentaron una tasa de rebote de 12.8%, mientras que las que cargaron en 3.3 segundos tuvieron una tasa de rebote de 20%. Soasta
Resumiendo
El diseño de páginas Web ha evolucionado en los últimos años con el surgimiento de una gran cantidad de recursos en la Web y CMS cada vez más complejos y versátiles, dejando a un lado la manera tradicional de hacer sitios Web.
Cuando planificamos tener nuestra propia página web tradicionalmente pensamos en 3 cosas: (1) comprar un dominio, (2) contratar un servicio de hosting y (3) diseñar tú mismo la página web /contratar a un diseñador web. Si vas a diseñar tu propia página web investiga qué opción es la que más te conviene, empápate de las mejores herramientas disponibles, como temas y plugins disponibles en el mercado, así como el precio y escalabilidad de las mismas.
Procura invertir en un servicio de hosting especializado en la plataforma que estás utilizando, con las características suficientes de memoria, espacio en disco y velocidad para albergar tu sitio web priorizando su rendimiento. Recuerda que buscadores como Google rastrean mejor una página optimizada que una página lenta y desmejorada, y a todos nos conviene tener una buena calificación en Google.
Evalúa el rendimiento de los sitios web creados por esos proveedores por sus características como adaptabilidad (responsiveness) a toda clase de dispositivos como Smartphones, Tabletas, Laptops y Desktops, velocidad de carga, seguridad y la experiencia de usuario (UX) que te ofrecen al interactuar con sus páginas web.